Castillo

Castillo

viernes, 6 de julio de 2012

     Las tristezas del corazón se reflejan en los ojos, con lágrimas de sal y miradas perdidas al azar.
     Penas por el olvido, por el recuerdo y lo prometido, dolor en los amores vencidos, y lo no cumplido; tormentos en el alma, que nunca llega a la calma. Soledad por la partida, dejando el alma dormida, añoranzas de las verdades,  que a la realidad no persuade.

4 comentarios:

  1. ...Verdades que nunca fueron suyas ni mías, ¿entonces de quienes fueron?..como dice la canción: "paraísos perdidos, nunca los tuvimos, nunca fueron míos, solamente están en tu cabeza" (aunque a veces creo que están en mi cabeza)...Precioso texto nuevamente que me hace recordar esas vivencias...

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    1. Siempre hay que tener presente las viejas vivencias para seguir con ese aprendizaje. Gracias por tu seguimiento y comentario.

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  2. De nadas, es un placer seguirte, además cada uno aporta lo que puede, no??.Emi

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    1. El placer es mío al tenerte como seguidora. Gracias nuevamente.

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